AHORRAR ENERGIA EN EL AIRE ACONDICIONADO

• Comprar equipos eficientes, eligiendo los aparatos con etiquetado clase A, que consumen hasta un 50% menos. Ceñirse a la potencia estricta que se necesita. Calcular el equipo de acuerdo a la cantidad de metros cuadrados que se deseen enfriar. 
• Apagar el equipo cuando se sale de la oficina. Los equipos de hoy en día enfrían con mucha rapidez.
• Regular adecuadamente la temperatura de la estancia, manteniéndola entre los 22º y los 25º. Según aumente la humedad, sera necesario reducir la temperatura para mantener la misma sensación térmica. Una diferencia con la temperatura exterior de más de 12º C no es saludable y, además, por cada grado que disminuya la temperatura el aparato consumirá entre un 6% y un 8% más de energía.
• Aislar adecuadamente la oficina o la casa para evitar las pérdidas de energía. Utilizar toldos, cortinas y persianas que pueden reducir el calentamiento. El consumo de energía puede reducirse hasta un 30% menos si se evita la entrada excesiva de calor.
• El mantenimiento del equipo, revisando y limpiando regularmente (por lo menos una vez al mes) los filtros que suelen obstruirse con el polvo y la suciedad, mermando su rendimiento.
• Además de la temperatura, calcular los valores de humedad correctamente, que deben situarse entre el 40% y el 60%.
• Uso de colores claros en techos y paredes exteriores reflejan la radiación solar, evitando el calentamiento de los espacios exteriores.